Decir Sí a la Aventura

martes, 21 de julio de 2009

Yes Man (Estados Unidos / Australia – 2008)

Dirección: Peyton Reed.

Guión: Nicholas Stoller, Jarrad Paul & Andrew Mogel.
Cinematografía (Fotografía): Robert Y. Deoman.
Dirección de Arte: Eric Sundahl.
Música: Mark Everett & Lyle Workman.
Edición: Craig Alpert.
Reparto: Jim Carrey (Carl Allen), Zooey Deschanel (Allison), Bradley Cooper (Peter), John Michael Higgins (Nick), Rhys Darby (Norman) & Danny Masterson (Rooney).
Género: Comedia.



Calificación: 3


Hacer reír es mucho más difícil que hacer llorar, es lo que aseguran y con justa razón los comediantes, pero en los últimos años nos hemos encontrado que el hacer reír dentro de Hollywood debe tener un mensaje o una lección moral dentro de sus historias. Muchos son los actores y comediantes que dentro de sus películas, y en todos los géneros del humor, nos terminan contando sobre el aprendizaje de la vida en alguna lección moralina, y hablo de personajes de Hollywood que hasta parecen tener todo un legado ya que producen constantemente películas año tras año, me refiero a actores con cadenas productivas tan exitosas como Adam Sandler, Ben Stiller, Owen Wilson y en el caso de esta crítica a Jim Carrey. Para éste, no es la primera vez que se enfrenta a una maldición o destino que lo hace entrometerse y participar en situaciones cómicas, algunas de esas hilarantes aunque exageradas gracias a su expresión facial. En este caso se enfrenta a una serie de aventuras con la simpleza de aceptar o de decir que “sí” a todo lo que se le pregunte, a partir de esto le comienzan a suceder experiencias especiales, extrañas pero positivas a la vez, dándole la razón a todo una creencia sobre un destino que tiene que ver con su aceptación a la aventura y a la vida.




En la película nos encontramos con un elemento ya muy identificable en la comedia norteamericana, la “maldición”, un elemento sobrenatural que se convierte en la influencia y en el reconocimiento del personaje en que debe tener un comportamiento y una serie de acciones o si no una especie de “karma”, o hasta el mismo remordimiento y el destino de manera inmediata le regresará esas malas acciones y hasta con mayor fuerza, todo representado en situaciones cómicas que van de lo desagradable hasta lo trágico. Para el personaje de Jim Carrey lo que se trata de evitar es la soledad y el conformismo de la sociedad moderna, encontrando en la simple palabra “sí” (otra vez), la aventura de una vida llena de experiencias distintas. Esta estructura de pensamiento sobre la vida esta basada en los lineamientos morales de una sociedad basada en la religión judío - cristiana, con la idea del pecado y del remordimiento como parte esencial en el comportamiento y en la obediencia sobre lo bueno y lo malo, sobre las consecuencias de las acciones, ya sean buenas o malas.




Exageración, caras deformadas, gritos y movimientos bruscos son parte de la descripción del Jim Carrey que se presentó en el cine en sus primeras película. No llega a la exageración de “Ace Ventura” o “Cable Guy” (Dr. Cable), es más bien el personaje que más se ha adaptado a un público más general, del estilo de “Bruce Almighty” (El Todo Poderoso), un bromista que vive dentro de la clase trabajadora estadounidense. Encontramos mucho del Jim Carrey que gusta de los grandes públicos, un personaje con el cuál se pueden identificar gran parte del público. Con situaciones cómicas, música de relatos comunes, y con una historia que cambia de escenario pero no de esencia, es una formula ya conocida pero que entretiene una vez más.




La aventura de Jim Carrey lo lleva a una serie de lugares que son vistos como parte de la vida cotidiana y que se ha perdido en las relaciones de las sociedades actuales, tales como el salir con los amigos o el buscar una relación de pareja. El decir que “sí” a todo como una aventura de la vida le permite al personaje de Jim Carrey encontrarse con personajes fascinantes y divertidos. Las situaciones que vive no se dirigen a lo trágico, salvo en el caso romántico, si no a una felicidad de explorar espacios que no se imaginaba, y siendo su salvación de forma relativa la inocencia con la cuál se sumerge en situaciones que normalmente el hombre urbano trata de evitar por el simple miedo, como lo es al rechazo, la inseguridad y la incertidumbre. En la actualidad nos encontramos como individuos que solo estamos cómodos o conformes si logramos controlar nuestras acciones presentes y futuras, si sabemos que esperar.



Pero toda aventura debe tener un cómplice y ese papel lo tiene la bella y talentosa Zooey Deschanel, que aparece como el estereotipado personaje alocado y espontáneo que es una de las razones por la cuál el personaje principal se anima a tales acciones, es la atracción y el amor; esos elementos estructurados del cine convencional que logran que el personaje encuentre en el fondo su valentía tras una presentación depresiva y holgazana. Y que como en toda estructura de comedia romántica se encuentra con un explosivo desarrollo seguido del momento en donde la enamorada se da cuenta de que tal vez todo fue parte de una farsa, para que al final resurja en un momento de aprendizaje, demostrándole su amor y explicando como todo fue parte de un proceso de cambio, de que todo lo que expresaba era honesto. Como parte de la estructura narrativa impuesta por Hollywood y que forma parte de la educación moral y sentimental en casi todo el mundo.



Lo que tal vez salve un poco a la película es la intervención de un grupo musical que tiene participación en la película, formado por chicas y que se hacen llamar “Munchausen by Proxy” en el cuál participa Zooey Deschanel (aunque solo en la película). Con música electrónica y con letras extrañas y hasta divertidas sobre las supuestas experiencias de personaje de Zooey, esto nos muestra la otra cara de su talento, como músico, y que en la película lo hace muy bien, y que profesionalmente podemos encontrarla en sus inicios con su grupo “She & Him”.



Lo Mejor: Muy pocas cosas, se destaca la música de The Eels y de Munchausen by Proxy con Zooey Deschanel, por cierto menciono que es talentosa debido a su labor como cantante no como actriz, lo cuál aunque saca unas risas no es lo mejor que se le ha visto, ni siquiera cerca.

Lo Peor: Una película de Jim Carrey que pasa sin ton ni son, pudo haber existido o no, la carrera del comediante será lo mismo a pesar de su existencia, sus mejores interpretaciones serán las consideradas más serias como “Eternal Sunshine Of The Spotless Mind” o “The Truman Show”.

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